Un candidato que hasta hace unas semanas no estaba en los pronósticos ni el mapa de los expertos fue la sorpresa en las elecciones presidenciales de este domingo en Perú. Se trata del político de izquierda Pedro Castillo, quien -según la encuesta a boca de urna y el conteo rápido de actas- lidera la votación en el país andino seguido del economista liberal Hernando de Soto y de Keiko Fujimori.
“Querido pueblo peruano, queridos compatriotas, queridos maestros del Perú, en primer lugar quisiera saludar a los pueblos más olvidados de mi patria, saludar a los hombres y mujeres que están en el ultimo rincón del país, saludar a quienes están allá en los rincones de la patria donde no hay presencia del Estado”, dijo Castillo en un breve discurso este domingo. “Hoy al pueblo peruano se le acaba de quitar la venda de los ojos”, agregó.
Castillo, un profesor sindicalista de 51 años, nació el 19 de septiembre de 1951 en la provincia de Chota, departamento de Cajamarca. Durante su adolescencia y juventud hizo parte de una organización campesina en el pueblo de Puña, de donde es oriundo. La Ronda campesina, como era conocida, surgió como respuesta a la falta de protección estatal y para que la población se pudiera proteger de los grupos terroristas como Sendero Luminoso y MRTA.
El político de izquierda estudió educación primaria en el en el Instituto Superior Pedagógico Octavio Matta Contreras de Cutervo. Desde 1995, trabaja como profesor de primaria en Puña. Además, tiene un magíster en Psicología Educativa por la Universidad César Vallejo.
Castillo lideró huelgas de educadores y tan solo en el 2005, cuando se convirtió miembro del Comité de Cajamarca del partido político Perú Posible (derecha), inició de lleno su carrera como político.
En 2017 se hizo conocido a nivel nacional con la huelga de maestros que duró varios meses por los reclamos salariales. Y es que Castillo lidera el gremio más grande del Perú, con casi medio millón de afiliados.
“Se ha dicho que solo los politólogos o lo que tiene grandes pergaminos pueden conducir un país, y han pasado décadas, lustros y miren cómo han dejado el país”, afirmó este domingo el candidato presidencial.
Castillo irá a la segunda vuelta electoral en junio próximo y falta por definirse, con los resultados oficiales en las próximas horas, el rival que lo enfrentará. El conteo rápido apunta a que sería Keiko Fujimori, por lo que el país volvería a dividirse en el mismo clivaje de las últimas décadas: fujimorismo contra antifujimorismo. Sin embargo, a diferencia del ballotage de 2016 (cuando se enfrentaron dos candidatos derechistas), esta vez también está en debate el modelo económico.
El ascenso vertiginoso del líder sindical es comparado con el que logró el entonces desconocido Alberto Fujimori en 1990, cuando venció en segunda vuelta al escritor liberal Mario Vargas Llosa prometiendo políticas de izquierda (que nunca aplicó, sino todo lo contrario). No obstante, Castillo sí ha tendio un recorrido político, aunque es igual de incógnita cuánto realmente aplicaría de su plan de gobierno en caso de triunfo.