El líder de la Francia Insumisa (LFI), Jean-Luc Mélenchon, afirmó este domingo que la unión de izquierdas del Nuevo Frente Popular (NFP) es la única alternativa a la ultraderecha, pero en paralelo anunció que en la segunda vuelta de las elecciones legislativas, el próximo 7 de julio, retirarán las candidaturas allí donde han quedado en tercer lugar.
«En todas las circunstancias nuestra consigna es clara: ni un voto de más para el RN (siglas en francés de Agrupación Nacional, el partido de Marine Le Pen), ni un escaño de más para el RN», afirmó tras conocerse las primeras estimaciones de voto, que dan la victoria a la ultraderecha con un tercio de los votos y al NFP el segundo lugar, con en torno al 28 % de los sufragio.
Por ello, aunque en la mayor parte de las circunscripciones la segunda vuelta del 7 de julio será un duelo a dos, mayoritariamente entre el NFP y RN, allí donde tres candidaturas pasan a la siguiente ronda, el bloque izquierdista retirará la suya para evitar dividir el voto frente a la ultraderecha.
Mélenchon hizo hincapié en que la «trampa» de la disolución de la Asamblea Nacional y la convocatoria anticipada de elecciones legislativas que ideó el presidente francés, Emmanuel Macron, se ha vuelto en su contra en una «dura e indiscutible derrota del presidente, de su candidato (el primer ministro, Gabriel Attal) y de la pretendida mayoría presidencial».
«Hay que dar una mayoría absoluta al NFP, que llega como la única alternativa», afirmó el dirigente izquierdista, que se mostró optimista sobre una mejora de las cifras de la coalición de izquierdas (que engloba a LFI, al Partido Socialista, a los comunistas y a los ecologistas) una vez se vayan conociendo los resultados definitivos a lo largo de la noche.
Para Mélenchon, la cita con las urnas del 7 de julio será de una «intensidad excepcional» y agradeció la fuerte movilización de este domingo.
«No se trata solo de votar contra, no sólo de formar barrera, se trata de votar por otro futuro respetuoso con todas las personas», afirmó. EFE