La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) solicitaron a la comunidad internacional 1.590 millones de dólares para apoyar a tres millones de refugiados y migrantes venezolanos durante el año 2024.
La ayuda, canalizada a través de la Plataforma de Coordinación Entre Agencias para Refugiados y Migrantes de Venezuela (R4V), busca apoyar a comunidades de acogida de estos venezolanos desplazados en diversos países de Latinoamérica y el Caribe, indicaron las dos agencias de la ONU en un comunicado conjunto.
Más de 7,7 millones de venezolanos dejaron su país en los últimos años debido a la crisis económica y política que sufre, y de ellos más de 6,5 millones residen en otras naciones de la región latinoamericana como Colombia, Perú, Brasil, Ecuador o Chile.
OIM y ACNUR calculan que más del 60% de estos refugiados y migrantes han regularizado ya su situación en los países de acogida.
El año pasado el programa de R4V dio asistencia humanitaria y para la integración a dos millones de refugiados y migrantes venezolanos, pero OIM y ACNUR calculan que todavía es necesario asistir a alrededor de 4 millones de miembros de este colectivo.
Con los fondos se busca, entre otras cosas, ayudar en los trámites de solicitud de asilo, los de regularización de la residencia y el proceso de integración socioeconómica, «con el fin de que refugiados, migrantes y comunidades de acogida puedan tener estabilidad y un futuro esperanzador», subrayaron OIM y ACNUR.
Las agencias recuerdan que cientos de miles de venezolanos todavía emprenden peligrosas rutas en su búsqueda de lugares mejores para vivir, por ejemplo la que atraviesa el Tapón del Darién, la selva en el istmo panameño que separa Centroamérica de América del Sur.
OIM y ACNUR también subrayan que su plan bienal de ayuda a estos migrantes y refugiados sólo se ha financiado por ahora en un 20%.
«Pese a las múltiples crisis globales, la comunidad internacional no debe olvidar la situación de millones de refugiados y migrantes en Latinoamérica y el Caribe», afirmaron.
EFE