Nicolás Maduro sostuvo la noche de este lunes una reunión con la Dirección Nacional del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), en medio de la guerra interna en el régimen, que ha dejado varios funcionarios chavistas detenidos y la renuncia del ahora exministro de Petróleo, Tareck El Aissami.
Maduro informó que ha aceptado la renuncia de El Aissami «para facilitar todas las investigaciones, que deben dar como resultado el establecimiento de la verdad y el castigo de los responsables”.
Aseguró que el ahora exministro, que no estuvo presente en la reunión a pesar de ser miembro de la directiva del PSUV, mostró su disposición «a aportar toda la información que maneja y apoyar todas las investigaciones contra estos grupos de bandidos y mafiosos“ y “ha ratificado su condición de militante revolucionario y está en la disposición de tener la voluntad de cooperar en toda la investigación”.
Corrupción incrustada
En su alocución, Maduro dijo que él mismo ha dirigido las investigaciones de esta operación e indicó que desde el 15 de febrero conocía detalles de la trama corrupta.
«Hemos asumido una postura frontal contra la corrupción y los corruptos, contra el bandidaje, contra los que roban al pueblo, estén donde estén, vengan de donde vengan, se crean lo que se crean. He estado dándole información completa al buró político del PSUV de todas las investigaciones que he conducido personalmente con la policía anticorrupción, el SEBIN y demás cuerpos para desmembrar estas mafias que se han enquistado en importantes sectores del aparato económico, jurídico y político de Venezuela», afirmó Maduro.
El mandatario explicó que estas mafias «se incrustaron en el cuerpo de PDVSA, en el cuerpo de la SUNACRIP» y que también han descubierto «otros casos de venta de sentencias para favorecer a narcotraficantes, a delincuentes, por parte de jueces con importantes cargos, en este caso del cuerpo judicial de Caracas».
Maduro pidió un «castigo ejemplar» para todos «los bandidos y corruptos», entre los que destacó hay «importantes empresarios, muy importantes gerentes, altos funcionarios del Estado y diputados».
Se refirió en particular al caso del alcalde del municipio Santos Michelena del estado Aragua, Pedro Hernández, de quien dijo «está comprobado plenamente en las investigaciones sus vínculos directos con la banda del criminal, del asesino, alias El Conejo. Sus vínculos múltiples, sus negocios. ¡Una cosa increíble!».
En el encuentro, que se realizó en el Hotel Humboldt en el parque nacional El Ávila, participaron Cilia Flores, Diosdado Cabello, Jorge Rodríguez, Delcy Rodríguez, Nicolás Maduro Guerra, Tania Díaz, Francisco Torrealba, Erika Farías, Jesús Faría, Pedro Carreño, Carmen Meléndez, Héctor Rodríguez, Diva Guzmán, Yelitze Santaella y Grecia Colmenares, entre otros.
Destacó la ausencia del exministro El Aissami, quien forma parte de la dirección nacional del PSUV, y del diputado Hugbel Roa, que según versiones extraoficiales fue detenido la noche del domingo por la Policía Nacional Anticorrupción.