El presidente turco, el islamista Recep Tayyip Erdogan, aseguró este lunes que Turquía «no necesita» el activismo LGTB y pidió a los miembros de su Gobierno «estar vigilantes» frente a este «peligro».
«En nuestro país hay corrientes de pervertidos que representan una amenaza masiva para nuestros hijos», dijo Erdogan ante un foro de mujeres en Estambul.
«Un concepto llamado LGTB no está en nuestro libro. Pero ¿está en el libro del CHP (oposición socialdemócrata)? Sí. ¿Está en el libro de otros cachorros de la oposición? Sí. ¿Marchan juntos? Sí. Nosotros no necesitamos una cosa así», dijo el mandatario.
El jefe del Estado exhortó a «los ministerios a ser aún más vigilantes frente a este gran peligro», en referencia a los movimientos por los derechos de gais y lesbianas.
La homosexualidad es legal en Turquía desde 1858 y aunque sigue siendo un enorme tabú en amplios sectores de la sociedad, existen movimientos activistas, festivales de cine y jornadas anuales dedicadas a temática gay.
En los primeros años de su gobierno, el partido de Erdogan, el islamista AKP, favoreció un ambiente de debate abierto en el que también se celebraron las primeras marchas de orgullo gay en Estambul, pero a partir de 2013 volvió a prohibir esas manifestaciones.
Tanto Erdogan como los partidos de la oposición ya han entrado este mes en lo que parece una precampaña electoral para los comicios parlamentarios y presidenciales previstos para junio próximo.
Con información de EFE