La Plataforma Unitaria responsabilizó este miércoles al régimen de Nicolás Maduro por la devaluación del bolívar registrada en los últimos días que «sigue empobreciendo a la familia venezolana».
El economista José Guerra, miembro de la Comisión de Acuerdo de Gobernabilidad de la Plataforma Unitaria, aseguró que la devaluación del bolívar se debe a la desconfianza que tienen los venezolanos en esta moneda.
Guerra precisó que, ante la inflación acelerada, los ciudadanos adquieren bienes o divisas para proteger sus ingresos. «Cuando una moneda se está devaluando es porque el público quiere salir de ella», sentenció.
«La política que ha seguido el Banco Central de Venezuela de Maduro de intervenciones en el banco cambiario se ha traducido en una pérdida de más de 750 millones de dólares entre enero de este año y el 19 de agosto. El Banco Central no tiene cómo aguantar la demanda de dólares porque sencillamente no tiene oferta de dólares», explicó.
Añadió que este es un caso único en el mundo de un país petrolero que no está acumulando reservas internacionales en forma de dólares sino que más bien las está perdiendo.
Guerra precisó que el problema no reside en que el pago de bonos y salarios a los trabajadores está presionando el mercado cambiario, sino que la devaluación se debe a la «pérdida de confianza en la moneda nacional; primero por la hiperinflación que se vivió hasta enero de este año y luego por la inflación que se mantiene todavía elevada».
Guerra señaló que la salida a la crisis de Venezuela debe ser un cambio político y un cambio económico, recalcando que se deben generar nuevas políticas que generen confianza a los inversionistas, que a su vez restablezca el poder adquisitivo de los trabajadores venezolanos y que florezca el empleo.
Finalmente, sugirió que «aunado a eso se debe diseñar un programa para aumentar la producción petrolera. Actualmente se están produciendo 650 mil barriles diarios; Venezuela puede producir en el mediano plazo cerca de un millón quinientos mil barriles de petróleo, aumentar los incentivos de la agricultura y la ganadería, y sobre todo que el Banco Central no siga emitiendo dinero inorgánico».