Una operación para la captura de narcotraficantes de un poderoso grupo criminal dejó este martes al menos 25 muertos en un complejo de favelas en Río de Janeiro, Brasil, un año después de que la acción policial más letal de la ciudad acabó con la vida de 28 personas.
La Penha, en la zona norte de Río, amaneció con el sonido de los tiros, después de que agentes de la Policía Militar entraron en el gigantesco complejo de favelas de Río en busca de líderes del grupo criminal Comando Vermelho, uno de los más importantes de Brasil junto con el Primer Comando de la Capital (PCC).
Según la Policía, los agentes fueron recibidos a tiros por los criminales durante una incursión que dejó al menos 13 víctimas mortales, entre ellas 11 civiles presuntamente sospechosos, una vecina de esta región de barriadas pobres y otra persona de la que no se tiene detalles.
Posteriormente, fuentes oficiales elevaron el número de fallecidos hasta 25, aunque algunos de ellos aún no han sido identificados.
Las víctimas fueron trasladadas a un hospital de la zona, hasta donde se desplazaron familiares para reconocer los cuerpos ya sin vida.
El objetivo de la operación, según las autoridades, es intentar desarticular el Comando Vermelho, una facción “con una ideología de guerra” y que es “responsable por más del 80% de los enfrentamientos armados” del estado de Río de Janeiro.
Vila Cruzeiro fue una de las favelas de Río ocupadas a finales de 2010 por el Ejército brasileño en una gran operación para expulsar el narcotráfico, pero los grupos han ido paulatinamente recuperando el control de la región.
Con información de EFE