Decenas de miles de personas de toda España participaron este domingo en Madrid en una gran manifestación en defensa del mundo rural, muy afectado por los altos precios de la energía, que les hace vender sus productos por debajo del coste de producción.
Unos 1.500 autobuses llegaron a la capital con los manifestantes, a los que acompañan tractores y animales, que van desde perros de caza hasta caballos, como símbolo del mundo rural, junto con el ruido de trompetas, globos y mucho color.
La manifestación, convocada por las principales organizaciones agrarias y ganaderas de España, arrancó en las puertas del Ministerio de Agricultura y discurre por el Paseo del Prado y de la Castellana, principal arteria que recorre la capital de norte a sur, hasta llegar al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico.
A la convocatoria de hoy se sumaron también asociaciones de caza y defensores del toro de lidia, así como los partidos Vox (ultraderecha), el conservador Partido Popular (PP) y Ciudadanos (liberales), cuyos líderes asistieron a la manifestación.
El objetivo, según los organizadores, es “alzar la voz y reivindicar el futuro para los pueblos” y pretenden que sea su mayor manifestación tras la pandemia, periodo en el que se les consideró “esenciales” para garantizar el suministro de la población en pleno confinamiento.
Reclaman “un plan de choque” que haga frente a los altos costes y la baja rentabilidad del sector, problemas que se han agravado por la guerra en Ucrania, con más subida de los combustibles y la escasez de productos como cereales para los piensos del ganado.
Piden además que se aplique la nueva ley española de la cadena alimentaria, para que pueden vender sus productos a precios justos y no por debajo de los costes de producción.
Todos estos problemas hacen cada vez más inviable la vida en el campo, lo que provoca el abandono de este sector por parte de la población más joven, que se traduce también en la despoblación en amplias zonas de la España interior.
En este sentido, el diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, el único representante en el Parlamento español de una plataforma de la España despoblada, declaró hoy en la manifestación que “la agricultura y el mundo rural pueden colapsar” en la situación actual.
Por ello, afirmó que el Gobierno “debe actuar rápidamente para solucionar problemas inmediatos como por ejemplo la subida de precios de los fertilizantes y del gasóleo”.
A los problemas ya citados, la manifestación llega tras una semana de huelga en el transporte de mercancías por el alza en el precio de los combustibles, lo que cortó la cadena de suministro alimentaria, incluso desde el primer eslabón, impidiendo que algunos productores de leche puedan hacer circular sus mercancías, así como otros productos frescos como frutas y hortalizas.
El sector sufrió además estos meses una prolongada sequía que puso en riesgo la campaña de algunos cultivos y ante la que el Gobierno esta semana anunció un paquete de ayudas fiscales, laborales, financieras e hidrológicas.