El laboratorio farmacéutica AstraZeneca afirmó este jueves que una tercera dosis de su vacuna contra el covid-19 aumenta “significativamente” el nivel de anticuerpos contra la variante Ómicron, citando un estudio clínico.
“Los niveles de anticuerpos que neutralizan Ómicron tras una tercera dosis” de la vacuna anticovid de AstraZeneca, “eran globalmente similares a los niveles alcanzados tras dos dosis contra la variante delta”, detalla el comunicado.
El gigante anglo-sueco anunció de manera paralela en un comunicado separado que su cóctel de anticuerpos de larga acción Evusheld para la prevención del covid “mantiene su actividad de neutralización contra la variante Ómicron, según un estudio de la universidad de Oxford y de la escuela de medicina de la universidad Washington y St Louis de Estados Unidos.
“Los niveles observados tras una tercera dosis eran más elevados que los anticuerpos hallados en los individuos que habían resultado contagiados antes y se recuperaron” de las variantes Alfa, Beta, Delta y de la cepa de origen del covid-19, precisa AstraZeneca.
El estudio sobre la tercera dosis fue llevado a cabo “de manera independiente” por investigadores de la universidad de Oxford, con la cual AstraZeneca concibió su vacuna.
Varios estudios recientes, realizados en laboratorio, muestran que los niveles de anticuerpos se desploman frente a Ómicron en los vacunados con Pfizer/BioNTech, Moderna, y aún más con AstraZeneca o la vacuna china Sinovac.
Pfizer/BioNTech y Moderna también anunciaron recientemente que una dosis de refuerzo parecía relanzar claramente la inmunidad a través de anticuerpos, pero no hay datos sobre cuánto dura esta protección.
La Universidad de Oxford y la farmacéutica AstraZeneca habían anunciado este miércoles que estaban trabajando en adaptar su vacuna contra el coronavirus para que sea efectiva ante la nueva cepa del coronavirus, según información del periódico británico Financial Times.
De esta manera, Oxford y AstraZeneca se suman a laboratorios como Pfizer/BioNTech y Moderna que dijeron anteriormente que estaban estudiando la posibilidad de adaptar sus preparados a esta nueva variante, después de que los expertos advirtieran de que las actuales vacunas no serían tan eficaces ante Ómicron. Moderna informó que espera comenzar los ensayos clínicos a principios del año que viene.
“Junto con nuestros socios de AstraZeneca, hemos tomado pasos preliminares para producir una vacuna actualizada en caso de que sea necesario”, dijo al Financial Times el líder del grupo de investigación de Oxford, Sandy Douglas.
“Las vacunas basadas en adenovirus (como la fabricada por Oxford/AstraZeneca) podrían utilizarse en principio para responder a cualquier nueva variante con más rapidez de lo que algunos podrían haber pensado anteriormente”, agregó Douglas al periódico.
Los investigadores, según el diario, estiman que el desarrollo de esta vacuna puede llevar unos cien días.
En un análisis de laboratorio realizado la semana pasada se comprobó que el cóctel de anticuerpos Evusheld de AstraZeneca mantiene la actividad neutralizadora contra la variante Ómicron.
Estos estudios salen a la luz mientras muchos países europeos han vuelto a imponer fuertes restricciones por la rápida propagación de la variante Ómicron, que, según los científicos, es mucho más contagiosa que la Delta.