De acuerdo con cifras estimadas por el Observatorio Venezolano de Finanzas, la actividad económica durante el segundo trimestre de 2021 registró una contracción de 2,2%, menor al 33,7% del trimestre anterior.
De esta manera, en el primer semestre de 2021 la actividad económica refleja una contracción de 28%, con lo cual la economía venezolana acumula veinticinco trimestres (25) trimestres consecutivos de caída, lo que se ha traducido en la pérdida de más de 80% del valor del producto interno bruto (PIB), respecto al valor alcanzado en 2012.
De acuerdo con el Índice Mensual de Actividad Económica, todos los sectores que conforman el indicador, a saber, el petrolero, financiero y gobierno, experimentaron disminuciones, especialmente el sector de la banca, asociado este comportamiento a la política de encaje bancario que limita el crédito y a lo reducido del tamaño de ese sector, que no puede financiar una expansión de la producción. En el caso del petróleo, conviene destacar que la declinación se ha moderado y en lo relativo a la actividad del sector gobierno, ésta continúa severamente afectada por la disminución del gasto real del sector público, relacionada con la menor ejecución del gasto nominal debido a la insuficiencia de ingresos y la inflación.
Esta retracción de la actividad económica se ha expresado igualmente en una disminución de las remuneraciones de los trabajadores activos, pensionados y jubilados, especialmente en todas las instancias del Sector Público, de manera tal que se ha afectado de manera sustancial el consumo de los hogares, actualmente en situación de precariedad.