Estados Unidos instó este viernes a Rusia a “desmantelar” su programa de armas químicas y condenó que Moscú no haya “investigado” el intento de asesinato del opositor ruso Alexéi Navalny con un agente nervioso hace justo un año. Además, impuso sanciones contra nueve ciudadanos rusos y dos laboratorios científicos dependientes el Ministerio de Defensa de Rusia por su presunta implicación.
Con información de EFE
En un comunicado, firmado conjuntamente con el Reino Unido, el Departamento de Estado de Estados Unidos reafirmó su “condena al intento de asesinato de Navalny” y lamentó que Moscú “no haya investigado ni explicado con credibilidad el uso de un arma química” contra el opositor ruso.
“Urgimos a Rusia a cumplir íntegramente con la Convención de Armas Químicas, incluidas sus obligaciones para declarar y desmantelar su programa de armas químicas”, remarcó la nota.
Washington y Londres insistieron en su “interés en relaciones estables y predecibles con Rusia” sobre “la base de la implementación de sus compromisos internacionales”.
Estados Unidos ha impuesto sanciones a varios funcionarios rusos acusados de estar implicados en el intento de asesinato de Navalny.
El envenenamiento y encarcelamiento de ese líder opositor fue uno de los temas que centró la reunión en Ginebra (Suiza) en junio entre el presidente estadounidense, Joe Biden, y su homólogo ruso, Vladímir Putin.
Navalny estuvo a punto de morir en agosto de 2020 al ser envenenado durante un viaje a Siberia y ha acusado a Putin de ordenar al Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB) su asesinato. Su salud ha empeorado desde que ingresó en marzo en un centro penitenciario famoso por numerosas denuncias de abusos y torturas.
Ahora, Estados Unidos impuso sanciones contra nueve ciudadanos rusos y dos laboratorios científicos dependientes el Ministerio de Defensa de Rusia.
“Nuestras acciones hoy envían una clara señal de que no habrá impunidad al uso de armas químicas , ya que es inaceptable y viola las normas internacionales”, señaló el secretario de Estado, Antony Blinken en un comunicado al anunciar la decisión.
“El envenenamiento de Navalny fue una violación escandalosa de las normas internacionales contra el uso de armas químicas y fue parte de una campaña en marcha para silenciar las voces disidentes en Rusia”, señaló la directora de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro de EE.UU., Andrea Gacki, en un comunicado.
Los laboratorios sancionados por Washington son el Instituto Criminalístico del Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB) y el Instituto Estatal para Medicina Experimental Militar.
Entre las personas sancionadas se encuentran Kirill Vasiliev, director del instituto, y Vladimir Bogdanov, jefe del centro de tecnología especial del organismo; así como varios funcionarios del FSB que Washington considera que participaron directamente en el intento de asesinato del opositor ruso.
Como consecuencia, quedan congelados los activos que estas personas y entidades puedan tener bajo jurisdicción estadounidense y se prohíbe las transacciones financieras con instituciones financieras de EE.UU.
Se trata de la tercera ronda de sanciones aplicadas por Washington contra Moscú por el caso Navalny.