Estados Unidos celebró este jueves la sanción impuesta por el Reino Unido en contra del testaferro de Nicolás Maduro, Álex Saab, y su socio, Álvaro Pulido Vargas, por estar involucrado en casos de corrupción grave.
En una declaración conjunta, el secretario de Estado, Antony J. Blinken, y la secretaria del Tesoro, Janet L. Yellen, elogiaron las sanciones anticorrupción del Reino Unido.
«Estados Unidos acoge con beneplácito el anuncio del Reino Unido de imponer más sanciones en el marco de su régimen de Sanciones Globales Anticorrupción (GACS), que está diseñado para combatir la corrupción y las finanzas ilícitas», señalaron.
Los altos funcionarios de la Administración de Joe Biden aseguraron que «la corrupción tiene un efecto corrosivo en la sociedad: socava las instituciones democráticas, obstaculiza el desarrollo económico, agota la riqueza de las naciones y mantiene a la gente en la pobreza. Estados Unidos está comprometido a trabajar y apoyar a nuestros socios y aliados en la lucha contra la corrupción. La acción de hoy del Reino Unido es un paso importante en este esfuerzo», subrayaron.
Anunciaron, además, que Estados Unidos continuará trabajando con el Reino Unido y otros aliados y socios de ideas afines «para imponer consecuencias tangibles y significativas a quienes se involucran en la corrupción, así como para proteger el sistema financiero global».