La presidenta de la subcomisión de asuntos fronterizos, Gaby Arellano, informó que -tras seis días de trabajo desde El Valle del Cauca en Colombia hasta el puente fronterizo Rumichaca de Ecuador- constataron que el flujo migratorio de los venezolanos no ha cesado aún cuando la pandemia se mantiene.
Arellano aseguró que recopilaron testimonios de centenares de migrantes venezolanos que siguen transitando entre países pero no por las fronteras regulares sino por las trochas irregulares “aquí desde el puente Rumichaca entre Ecuador y Colombia, vemos que no hay nadie casi personas, pero si pudimos corroborar que son cientos de venezolanos que están pasando por las diferentes trochas trochas”.
Precisó que “por este paso fronterizo estarían transitando alrededor de 1000 personas diarias, que les cobran 10, 15, 20 y hasta 40 dólares, dependiendo del equipaje que carguen y de las condiciones económicas que poseen, y eso te da el beneficio de o pasar en carro o por una guaya a través de un río”.
En ese sentido resaltó que “esto demuestra lo que hemos estado denunciando, sobre todo el aumento de los llamados ‘coyotes’ que han aumentado entre Colombia y Ecuador”.
Llamado
Ante ello, hizo un llamado a los gobiernos de ambos países “Tenemos que hacer todo lo que esté a nuestro alcance para poder abrir los pasos regulares, porque si estos puentes están abiertos los coyotes, el tren de Aragua y estos grupos irregulares que controlan la trata de personas van a tener un golpe muy fuerte en sus finanzas”.
Asimismo fue enfática en señalar que es importante que la comunidad latinoamericana avance en abrir las fronteras, “con medidas de bioseguridad, sí, pero deben entender que mantener estos puentes cerrados sólo beneficia a los aliados de Maduro”.
Por último Gaby Arellano ratificó que de lograr estas medidas migratorias, se daría un golpe a esas mafias criminales que “han superado su corporación criminal y que tienen alianzas en todo el hemisferio, y buscan con esa plata que le quitan a los migrantes desestabilizar las democracias”.