Naftali Bennet logró este domingo el voto de confianza del parlamento israelí y accedió al cargo de primer ministro, destronando a Benjamin Netanyahu tras 12 años en el poder.
El derechista Bennet, ungido por una alianza que va desde la izquierda a la derecha e incluye a partidos árabes, obtuvo el voto favorable de 60 de los 119 diputados presentes (sobre 120 con que cuenta la Cámara), y 59 en contra, pertenecientes al Likud del saliente jefe de gobierno y a las agrupaciones de extrema derecha y ultraortodoxos.
“Entiendo que hoy no es un día fácil para muchos, pero tampoco de luto, es un día de cambio, de cambio de régimen en el marco de una democracia”, había indicado el líder de derecha radical en su discurso ante la Knéset.
“Prometo que este gobierno trabajará para todo el país en su conjunto, nadie debe tener miedo”, agregó.
También advirtió que su gobierno no dejará que “Irán desarrolle armas nucleares” y “se reserva una absoluta libertad de acción” contra Teherán.
En su turno, el jefe de gobierno saliente Benjamin Netanyahu dijo al parlamento que continuará en política y vaticinó que volverá “pronto” al poder.
“Si nuestro destino es estar en la oposición, lo haremos con la frente en alto, haremos caer a este mal gobierno y volveremos a dirigir al país a nuestra manera (…) ¡Volveremos pronto!”, aseguró .