Falleció la venezolana Aylin Carolina Reyes Castillo (33) en Argentina luego de permanecer 48 horas internada con muerte cerebral tras ser baleada el domingo en su vivienda en Morón.
La joven murió la noche del lunes como consecuencia de un paro cardiorrespiratorio en el hospital de Haedo, donde permanecía internada según reseñó El Clarín.
El suceso ocurrió cuando Reyes y su pareja Luis Ernesto Campis Bermúdez (32), ambos venezolanos, se encontraban en su casa, cuando dos hombres, que acompañaron a una clienta hasta el lugar, les dispararon en la cabeza.
Cómo sucedieron las cosas, según reseña El Clarín.
La venezolana se desempeñaba como manicurista y tenía varios carteles en la puerta donde anunciaba sus servicios y el de su prima: esmaltado semipermanente, belleza de manos y alisados para el pelo.
Fue esa la excusa que usaron los asesinos para concretar el ataque. Horas antes, la mujer había coordinado un turno para ser atendida en el teléfono celular que indicaban en la puerta.
Así, llegó y simuló esperar para ser atendida junto a dos hombres. De un momento a otro, éstos sacaron sus armas y los agredieron. «¡Esto es un atraco!», gritaron.
Primero sujetaron a Aylin delante de sus tres hijos. La arrastraron hasta la habitación y le dispararon directo a la cabeza.
Lo mismo le hicieron a Campis Bermúdez, la pareja y padre de los hijos de Aylin, que también resultó herido de un disparo que le rozó la cabeza. Los atacantes escaparon y las víctimas llegaron con vida al hospital. El hombre fue operado para quitarle un plomo de una bala que le quedó alojado entre el cuero cabelludo y el cráneo; y se encuentra fuera de peligro y recuperándose.
Los hijos de la pareja quedaron al cuidado de la prima que vivía con ellos y que, a su vez, también es madre de un nene.
Responsables del asesinato
Hasta los momentos no se conoce quienes fueron los responsables del ataque, ni los motivos por los cuales se ejecutó, según informaron fuentes de la investigación.
La única pista fue el vehículo Fiat Siena negro con el techo gris en el que llegaron los agresores, del que perdieron su rastro camino a la Ciudad de Buenos Aires.
La hipótesis del ajuste
Si bien los investigadores no pueden descartar que se haya tratado de un robo, las hipótesis estarían relacionadas a un ajuste de cuentas. ¿Por qué? Los agresores planificaron el ingreso al domicilio, fueron directamente a atacar a la pareja y apuntaron a matar.
Según trascendió, entre las variables analizadas apuntan a una deuda vinculada a venta de drogas o a un «préstamo» de 4.000 dólares que la familia utilizó para migrar de Venezuela y radicarse en la Argentina.
Por ello, sospechan que haya un vínculo con las víctimas y quienes ordenaron el ataque desde su país natal. Aunque la hipótesis de la deuda no conforma a los investigadores que, por la gravedad del hecho, apuntan a otras pistas.
La pareja había llegado al país hace sólo tres meses, por eso otra de las versiones apuntarían a que podrían haber migrado escapando de las amenazas desde Venezuela.
Algunos vecinos del barrio habían «señalado que en la última semana se observaron varios autos de alta gama circular frente al domicilio» de las víctimas, según Télam.
La investigación quedó en manos del fiscal Nicolás Filippini, de la UFI N° 1 de Morón. En las últimas horas modificó la calificación legal de la causa a «homicidio agravado por el uso de arma de fuego».
Con información de El Clarín.