El ministro de Defensa del régimen chavista, Vladimir Padrino López, ofreció este lunes un balance tras dos semanas de conflicto armado en el estado Apure.
«Se han dado 9 bajas de estos grupos terroristas, y lamentablemente hemos sufrido la pérdida de 8 compañeros de la FANB, así como también 34 heridos que han recibido asistencia médica. Ya más de 21 han salido de alta«, indicó.
Informó también que 33 personas han sido presentadas ante la justicia militar, 9 campamentos fueron desmantelados y 16 dispositivos explosivos fueron desactivados en el territorio aledaño a La Victoria. “En 15 días hemos hecho lo que Colombia en un año”, agregó.
Desestima desplazamiento masivo
El funcionario desestimó que haya tantos desplazados como han reportado las autoridades del municipio colombiano de Arauquita. «Dijeron que 6 mil personas de La Victoria habían cruzado el río, cuando nuestro censo dice que no pasan de 3.500 personas«, afirmó.
Como de costumbre, acusó al Gobierno colombiano de supuestamente estar detrás de un plan para desestabilizar Venezuela, del cual no presentó pruebas.
«La estrategia imperial es tercerizar el conflicto con bandas criminales, delincuentes, de grupos estructurados de violencia, de grupos armados, narcotraficantes, e incursionar en Venezuela, ocupar un espacio territorial, y además no solo instalar sus bases logísticas para el narcotráfico, sino también venirse al centro del país para desestabilizar«, aseguró.
«Toda la violencia y los males de Colombia se están viniendo para Venezuela y no hay quien contenga eso», añadió.
Ataque a los medios
Padrino López cuestionó nuevamente la cobertura de los medios de comunicación sobre el conflicto en la frontera. Insistió en negar que hayan detenido a los periodistas de NTN24, Luis Gonzalo Pérez y Rafael Hernández.
«Sacaron un comunicado y toda una alaraca porque habíamos resguardado a un grupo de periodistas. Ingresaron y solamente la FANB lo que hizo fue resguardarlos, alimentarlos, cuidarlos y evacuarlos fuera de la zona de conflicto«, dijo, a pesar de que los reporteros estuvieron en poder de los militares e incomunicados por más de 24 horas.
«Todas esas matrices se han desmontado por completo, porque tienen patas cortas. Estamos actuando con la constitución en la mano, respetando los derechos humanos«, señaló.