Los directores del Centro para la Democracia, el Desarrollo y el Estado de Derecho (CDDRL) de la Universidad de Stanford, Kathryn Stoner y el reconocido politólogo Francis Fukuyama, emitieron un comunicado conjunto para exigir la liberación inmediata del activista venezolano Jesús Armas, al cumplirse 10 meses de su detención arbitraria por parte del régimen de Nicolás Maduro.
«Jesús pertenece a un aula, no a una celda», afirman los académicos de una de las universidades más prestigiosas del mundo, al denunciar que Armas ha sido víctima de desaparición forzada, tortura y reclusión en condiciones inhumanas desde el 10 de diciembre de 2024.
Armas, quien fue becario del programa Fisher Family Summer Fellow de Stanford en 2022 y recientemente admitido al máster en Políticas Internacionales Ford Dorsey, fue detenido por su labor al frente de la ONG Ciudadanía Sin Límites y por su rol como organizador clave en la campaña presidencial de María Corina Machado y Edmundo González en Caracas.
«Durante su desaparición, fue sometido a tortura, incluyendo asfixia mecánica y restricciones físicas prolongadas», denuncian Stoner y Fukuyama, señalando que actualmente se encuentra recluido en el centro de torturas El Helicoide, «una de las prisiones políticas más infames de América Latina», donde permanece incomunicado y en aislamiento total desde hace meses.
El comunicado también recuerda que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares a favor de Jesús Armas, advirtiendo el grave riesgo para su vida e integridad. Sin embargo, denuncian que el Estado venezolano no ha tomado ninguna medida efectiva para cumplirlas.
Los académicos pidieron a la comunidad internacional, gobiernos democráticos y organizaciones de derechos humanos “alzar la voz y condenar el patrón creciente de represión y tortura contra actores democráticos pacíficos en Venezuela”.
“Jesús Armas no ha cometido ningún crimen. Es un servidor público dedicado a la justicia social y los valores democráticos. Su detención es una afrenta no solo contra él, sino contra todos quienes creemos en la libertad y la dignidad humana”, concluyeron.