El venezolano Rafael Dudamel quedará en la historia del fútbol colombiano al ser el entrenador que le dio la primera estrella de la liga local al Atlético Bucaramanga, un equipo que confeccionó con la fe del carbonero de que podía llegar a lo más alto del firmamento futbolístico.
Y es que Dudamel, de 51 años, se las arregló con un equipo de obreros para dejar atrás 75 de espera para gritar campeón y con ello pegar a su escudo la primera estrella y llevar a su vitrina por primera vez la copa con la que premian al ganador de la liga en Colombia.
Fue un campeonato sufrido, luchado hasta el último momento y que este sábado se definió en la tanda de penaltis porque en el global los equipos quedaron igualados 3-3, tras el 3-2 de vuelta y el 1-0 de ida.
En esa suerte los Búcaros marcaron seis de sus siete cobros, en tanto que Santa Fe acertó cinco y erró dos.
Dudamel, que nació el 7 de enero de 1973 en San Felipe (Venezuela), arribó a Bucaramanga en diciembre de 2023 para recibir al Leopardo, que pasaba por otra época de vacas flacas en cuanto a resultados.
Pese a que en ese entonces del equipo salieron 16 jugadores puso manos a la obra y comenzó a reclutar jugadores que se acomodaban a lo que tenía en mente.
Así llegaron el arquero Aldair Quintana y el argentino Fabián Sambueza, un fino volante con vocación de ataque que le resolvió muchos partidos al equipo.
Ayudado por su asistente técnico, el también venezolano Marcos Mathias, diseñó un inusual esquema de cinco defensas, dos volantes de marca y dos creativos que alimentaban a un único punta. Es lo que se conoce como un 5-2-2-1, pero que podía variar según las necesidades de cada partido.
Otros artífices del título fueron Jéfferson Mena, líder y capitán del equipo; Freddy Hinestroza y Fabry Castro.
Por el equipo Leopardo pasaron en otras décadas finos jugadores como los argentinos Américo Montanini, Miguel Oswaldo González y Jorge Ramoa, al igual que los colombianos Hermán ‘Cuca’ Aceros y Misael ‘El Papo’ Flórez, entre otros. EFE