La ONG Provea pidió a la comunidad internacional que realice gestiones diplomáticas para evitar la aprobación del ‘proyecto de ley contra el fascismo, neofascismo y expresiones similares’, por considerarlo un avance en la «construcción de un modelo de Gobierno totalitario».
«La comunidad internacional, especialmente los organismos con mandato en protección a los derechos humanos, deben realizar todas las gestiones diplomáticas necesarias para evitar la promulgación definitiva de la propuesta», exhortó la ONG este jueves.
Sostiene que la aprobación de este proyecto de ley significaría un «avance en la construcción de un modelo de Gobierno totalitario en el país, agravando aún más las garantías para el disfrute de los derechos humanos de la población».
A juicio de Provea, la calificación como «fascismo» de las manifestaciones ocurridas en 2014 y 2017 «justificaría la violación sistemática de derechos humanos ocurrida durante ese lapso, nivelando institucionalmente a víctimas con victimarios y relativizando la investigación de la Corte Penal Internacional por delitos contra la humanidad».
Añadió que el proyecto de ley presenta definiciones conceptuales «abiertas y de interpretación arbitraria», ya que, según el artículo 4, los rasgos característicos del fascismo son «el racismo, el chovinismo, el clasismo, el conservadurismo moral, el neoliberalismo, la misoginia y todo tipo de fobia contra el ser humano y su derecho a la no discriminación y a la diversidad».
«La penalización de elementos subjetivos como el ‘conservadurismo moral’ o la criminalización de una ideología, el neoliberalismo, es contraria el estado social de justicia y derecho establecido en la Constitución de 1999», apuntó.
Cabe destacar que el régimen presentó ante la Asamblea Nacional chavista el ‘proyecto de ley contra el fascismo, neofascismo y expresiones similares’ elaborado por orden de Nicolás Maduro.
El documento, presentado por la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, incluye cuatro capítulos y 30 artículos, y establece «medios y mecanismos para preservar la convivencia pacífica, la tranquilidad pública, el ejercicio democrático de la voluntad popular, el reconocimiento de la diversidad, la tolerancia y el respeto recíproco, frente a agresiones de orden fascista».
Con información de EFE