El embajador de Argentina en Venezuela, Oscar Laborde, anunció el fin de su gestión tras la victoria electoral de Javier Milei, a quien calificó como «fascista».
Laborde explicó que su cargo es de «embajador político» y por eso, con el cambio de gobierno, termina su función. En este sentido, analizó que «con el triunfo de la derecha fascista en nuestro país» la relación entre Venezuela y Argentina «se va a debilitar, posiblemente», aunque espera que no se rompan.
«Ojalá se mantengan por lo menos las relaciones comerciales. Él ha tildado a Maduro de dictador, Maduro le dijo que era un fascista. Esperemos que eso no escale y que se mantenga lo que hemos logrado en estos años y que las relaciones puedan seguir aún con diferentes posiciones, el intercambio comercial, cultural y deportivo», expresó en entrevista con Carlos Croes en Televén.
Durante la entrevista, el embajador kirchnerista repitió y avaló los ataques proferidos por Nicolás Maduro, quien la semana pasada tildó de «neonazi» al presidente electo y lo comparó con Jorge Rafael Videla y Augusto Pinochet.
«Es verdad que lo es (neonazi). La mayoría del pueblo argentino votó a un candidato que es un fascista», dijo Laborde. «Lo que ha prometido y lo que está haciendo en estos primeros días aún sin ser presidente va a destruir mucho los derechos», opinó el representante diplomático argetino.