La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (IFRC, por sus siglas en inglés) expresó este lunes, a través de un «representante especial» enviado a Venezuela, su compromiso de cooperar con la junta directiva «ad hoc» de la Cruz Roja en el país, intervenida el pasado 4 de agosto por orden del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
Según una nota de prensa difundida este lunes, Walter Cotte, representante especial enviado por la IFRC al país, manifestó el «compromiso que mantiene para trabajar, de manera articulada, con la junta reestructuradora», presidida por el expresidente de Fedecámaras -la mayor patronal de la nación- Ricardo Cusanno.
Cotte destacó la «indispensable importancia en asegurar» que la labor humanitaria de la Cruz Roja venezolana esté «apegada a los principios fundamentales del movimiento internacional», especialmente «los de imparcialidad, neutralidad e independencia, para garantizar que sea una institución sostenible y autónoma».
El enviado especial de la IFRC dijo que se trabajará en el «cuidado y protección de los voluntarios y personal», así como en el «desarrollo de procesos democráticos internos, con la intención del fortalecimiento de la sociedad nacional».
Durante su misión en Venezuela, Cotte se ha reunido, por separado, con la junta reestructuradora, representantes diplomáticos y la vicepresidenta ejecutiva de la nación, Delcy Rodríguez, encuentro que el presidente de la IFRC, Francesco Rocca, consideró como alentador para reafirmar la voluntad de conocer y colaborar con las autoridades en el proceso judicial de la Cruz Roja nacional, según la nota.
El pasado 28 de julio, el fiscal general impuesto por la Asamblea Nacional Constituyente, Tarek William Saab, informó de la apertura de una investigación sobre el «presunto acoso y maltrato» cometido contra voluntarios y trabajadores de la Cruz Roja nacional por parte del expresidente Mario Villaroel, cuyas funciones cesaron por orden del TSJ el 4 de agosto.
Por su parte, Villaroel rechazó el viernes «categóricamente» la «ilegal» intervención de esta organización y las acusaciones en su contra, las cuales tildó de «deshonestas».
La Federación Internacional de la Cruz Roja mostró el pasado miércoles su preocupación por la situación de la sociedad nacional de este movimiento en Venezuela.
EFE