El exgerente de PDVSA, Alfredo Chirinos, reveló las torturas que sufrió en la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) durante el tiempo que estuvo encarcelado, tras haber sido detenido en febrero de 2020 por denunciar corrupción en la estatal petrolera.
«A mí me quemaron la cara, me reventaron las costillas a patadas… ¿Y saben qué pensaba en ese momento? Pensaba en todos los amigos con los que discutí diciendo que en este proceso ya la torturarse de acabado. A ellos les pido perdón acá, porque fueron amistades que incluso hasta perdí por imponer mi creencia de que aquí la tortura se había acabado», expresó en entrevista con el periodista Vladimir Villegas, tras haber recibido libertad plena por cumplimiento de la pena a la que había sido condenado por supuesto espionaje.
Chirinos denunció que la jueza a cargo de su caso, Carol Bealexis Padilla, fue testigo de estas torturas pero las ignoró.
«Duré 4 horas boca abajo recibiendo patadas y con químicos en la cara que me peló la cara y que adicional la juez me vio así el día que me presentaron y cuando le mostré todos los golpes me dijo que eso no importaba», relató.
Destacó que Padilla, al igual que el juez José Mascimino Márquez García (que ahora está detenido acusado por una trama de corrupción), han sido la responsable de los casos de varios presos políticos.
«Es un es un sistema de corruptos (…) Hay infinidad de casos llevados por estos dos jueces y tú ves un patrón. La mayoría de los casos el primer delito que les colocan es terrorismo, para que caiga en estos dos tribunales que simplemente cumplen órdenes», explicó.
Chirinos, quien se desempeñaba como gerente de Operaciones de Especialidades de PDVSA, fue condenado a prisión el 4 de febrero de 2021, junto a su compañera Aryenis Torrealba, ex gerente de Operaciones de Crudo de PDVSA, por supuesta divulgación o suministro de datos o información. previsto en el artículo 55 de la Ley Orgánica de Seguridad de la Nación.