En Siria, el Ministerio de Educación ordenó este lunes el cierre de todos los jardines de infancia, escuelas y universidades del país durante una semana por el terremoto de magnitud 7,7 con epicentro en Turquía, que en en este país ha dejado al menos 820 muertos.
El ministro de Educación sirio, Darem Tabaa, dijo a la agencia de noticias oficial siria SANA que, «tras examinar las condiciones de las escuelas y el estado general de los ciudadanos tras el terremoto de esta madrugada», se decidió suspender durante una semana el funcionamiento de los centros educativos en todo el país.
Asimismo, indicó que «tan solo una parte del personal administrativo» ha mantenido su horario laboral habitual en estos centros, con el objetivo de «brindar servicios de emergencia en caso de que sea necesario y para preparar las escuelas afectadas para que vuelvan a operar a principios de la semana que viene», según SANA.
Esta misma medida fue tomada también por las autoridades turcas, que anunciaron el cierre de los colegios de las diez provincias más afectadas por los terremotos, que han segado más de 1.000 vidas en Turquía.
De esta forma, todos los centros educativos cerrarán sus puertas en Kahramanmaras, la provincia donde se registró el epicentro, así como en Gaziantep, Sanliurfa, Diyarbakir, Adana, Adiyaman, Malatya, Osmaniye, Hatay y Kilis, en el sureste de Turquía.
De momento, el seísmo ha dejado al menos 1.121 fallecidos y más de 5.300 heridos en Turquía, a los que se suman otras 820 víctimas mortales y más de 2.300 heridos en territorio sirio. EFE