La nueva embajadora de EEUU en Rusia, Lynn Tracy, llegó anoche a Moscú para asumir su complicada misión en un país con la que las relaciones son prácticamente nulas y cuyo aparato propagandístico acusa a Estados Unidos y a la OTAN de ser los «auténticos agresores» en el conflicto bélico en Ucrania.
«¡Bienvenida de nuevo a Rusia, embajadora Tracy!», escribió la legación estadounidense en ruso en su cuenta oficial de Twitter con una fotografía de la diplomática recién aterrizada en Moscú.
Tracy fue encargada de negocios de la Embajada de EEUU en Moscú entre 2014 y 2017, por lo que conoce bien el país.
Además fue asesora senior para Asuntos Rusos en la Oficina de Asuntos Europeos y Eurasiáticos del Departamento de Estado de EEUU entre 2017 y 2018.
Tracy es la primera mujer que asume el cargo de embajadora de EEUU en Rusia y sucede en el cargo a John Sullivan, quien abandonó Rusia en septiembre pasado tras tres años de misión en este país.
Antes de viajar a Rusia, Tracy se reunió en Washington con el embajador ruso en EEUU, Anatoli Antónov.
Pese a estar las relaciones bilaterales en su punto más bajo desde la Guerra Fría, ambos países mantienen abiertos algunos canales de comunicación, al menos a ciertos niveles, a fin de abordar temas prácticos como el funcionamiento de sus respectivas embajadas y cuestiones técnicas.
El viceministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Riabkov, señaló el pasado lunes que la llegada de Tracy a Moscú permitirá continuar el diálogo sobre temas problemáticos en las relaciones, aunque «hasta el momento no ha sido posible hallar un terreno común» para resolverlos.
Las dos partes, por ejemplo, no han podido sentarse de nuevo a una mesa para abordar el diálogo estratégico y de reducción de armas nucleares, después de que Rusia cancelara unilateralmente una reunión que iba a celebrarse en noviembre pasado.
La nueva embajadora de EEUU en Rusia, que fue confirmada por el Senado de su país en diciembre, además de conocer bien el país donde ejercerá sus funciones, también es una experta en la región postsoviética, pues fue embajadora de Armenia en su último destino.
Además fue subsecretaria de Estado adjunta para Asia Central entre 2012 y 2014, encargada de negocios en Turkmenistán (2010-2011) y trabajó también con anterioridad en al legación de EEUU en Kirguistán. EFE