El gobernador demócrata del estado de California, Gavin Newsom, solicitó al fiscal general de Estados Unidos, Merrick Brian Garland, que se abra una investigación por el traslado irregular de migrantes, en su mayoría de Venezuela, por parte de los gobernadores republicanos de Texas, Greg Abbott, y de Florida, Ron DeSantis, a otros estados del país.
En una carta, divulgada a través de sus redes sociales, Newsom se mostró «horrorizado ante las imágenes de los migrantes que son enviados en autobuses y aviones en todo el país para ser utilizados como utilería política».
«Claramente, transportar familias, incluidos los niños, a través de las fronteras estatales bajo falsos pretextos es moralmente censurable, pero también puede ser ilegal», advirtió el mandatario californiano, al destacar que varios de estos migrantes habrían sido engañados.
«Varias de las personas que fueron transportadas a Martha’s Vineyard han alegado que un reclutador los indujo a aceptar la oferta de viaje basándose en representaciones falsas que serían transportados a Boston y recibirían acceso acelerado al trabajo autorización», explicó.
En consecuencia, instó el gobernador Newsom instó al Departamento de Justicia estadounidense «a que abra un investigación de posibles violaciones penales o civiles de la ley federal con base en esta supuesta esquema fraudulento».
En particular, planteó que se estos traslados implicarían «cargos de secuestro según las leyes estatales pertinentes» y según la Ley de crimen organizado y organizaciones corruptas.
Además, pidió que se investigue si se ha incurrido en una «violación de su derecho a la igualdad ante la ley», lo que a su juicio podría constituir «una conspiración de derechos civiles».