De acuerdo con las cifras compiladas por el Observatorio Venezolano de Finanzas, las remuneraciones reales de los trabajadores, incluyendo bonificaciones, en el mes de junio reflejaron una caída respecto a mayo de 2022.
Luego de haber alcanzado su máximo en diciembre de 2021, el ingreso real de los trabajadores del sector comercio y servicios (65% del total de los ocupados) en el Área Metropolitana de Caracas, ha venido declinando de manera sostenida como resultado de las elevadas tasas de inflación y la consiguiente aceleración del alza de los precios durante los meses de mayo y junio del año en curso.
De esta manera, en bolívares constantes de 2021, las remuneraciones de los trabajadores disminuyeron 6,6% entre diciembre de 2021 y junio de 2022. En términos de dólares estadounidenses, la remuneración promedio en junio se situó se situó en US$ 118,4, menor que la de los meses de mayo (US$ 119,5) y abril (US$ 120,3), respectivamente. Así, de acuerdo con la información recolectada, la remuneración promedio mensual en junio de los gerentes fue de US$ 261,4, la de los profesionales US$ 175,7 y la de los obreros US$ 107,4.
Al ajustar las remuneraciones en dólares con el alza de los precios medidos también en esa moneda, se aprecia que los ingresos de quienes reciben pagos en la moneda de Estados Unidos han perdido poder adquisidor equivalente a 5,7% durante 2022. Ello sugiere que la reducción del poder adquisitivo es generalizada. En términos de la canasta alimentaria, la remuneración promedio apenas cubre un tercio de la misma, ello sin incluir el gasto en servicios tales como alquiler de la vivienda, electricidad, gasolina, comunicaciones y medicinas. En el caso de los empleados del sector público la situación es todavía peor por cuanto no cuentan con mecanismos de ajustes salariales respecto a la inflación debido, entre otros elementos, a la virtual desaparición de las contrataciones colectivas.
En lo relativo a la dolarización de las transacciones, los datos indican que en junio, 45,2% de los pagos al comercio y los servicios se efectuaron en dólares y 54,8% en bolívares, sin embargo un significativo porcentaje (97%) de los comerciantes manifestó marcar sus precios en dólares.