Este lunes 11 de julio, al cumplirse el primer aniversario de la ola de protestas en contra de la dictadura Cubana, la Unión Europea (UE) reiteró su «gran preocupación» por la persecución a los ciudadanos que participaron en las manifestaciones.
El alto representante de la UE, Josep Borrell, recordó que hace un año «miles de ciudadanos cubanos salieron a las calles para expresar sus legítimas reivindicaciones acerca del deterioro de sus condiciones de vida, así como sus demandas relativas a derechos humanos, en particular a derechos civiles y políticos, y democracia».
Destacó que «dichas protestas espontáneas fueron recibidas con represión, con más de 1,400 personas arrestadas y 790 imputadas en conexión con dichos eventos».
Borrell manifestó que, desde entonces,»estos juicios suscitan preocupaciones importantes en relación a los principios básicos y estándares internacionales de transparencia y debido proceso».
El alto representante resaltó que la Unión Europea ha instado al régimen cubano a «respetar los derechos humanos y las libertades de los cubanos, incluyendo la libertad de asociación, la libertad de reunión pacífica y la libertad de expresión, y a poner en libertad a todos los prisioneros políticos y personas detenidas únicamente por ejercer sus libertades de reunión pacífica y expresión, y así continuará haciéndolo».
Josep Borrell también alentó al régimen de Miguel Díaz Canel «a que entable un diálogo significativo e integrador con los ciudadanos cubanos en torno a sus legítimas reivindicaciones» y que «permitan a la comunidad diplomática asistir a los juicios» contra los manifestantes.
«La Unión Europea recuerda la importancia de sus continuos intercambios con las autoridades cubanas sobre estos temas, y está dispuesta a apoyar todos los esfuerzos dirigidos a proteger, promover y aplicar los derechos humanos y libertades de todos los cubanos y a mejorar sus condiciones de vida, en el marco del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación entre la Unión Europea y Cuba», concluyó.