El dirigente nacional de Primero Justicia, Carlos Ocariz, visitó el estado Bolívar donde denunció que el régimen chavista ha llevado a la ruina a trabajadores de las empresas básicas de Guayana.
Junto al dirigente local Rachid Yasbek, Ocariz recorrió los galpones de Alcasa y conversó con trabajadores que tienen más de un año sin poder cumplir sus labores.
«Estamos en presencia de uno de los mayores crímenes que se han cometido en los últimos 20 años en Venezuela. Todas estas empresas producían hasta 10% del PIB no petrolero y hoy son una ruina, una chivera», condenó.
Los trabajadores señalaron que tienen todo este tiempo «mendigando» al Estado que los reenganche. «Antes este era uno de los mejores empleos porque tenían muy buenos contratos colectivos y hoy tienen que mendigar para poder trabajar. Se dividen en dos grupos, unos trabajando y otros en su casa cobrando la mitad de lo que cobran los que están trabajando».
En palabras de Ocariz, se trata de «un despilfarro total, una negligencia enorme, corrupción y un atropello», al asegurar que antes se producían 440.000 toneladas de aluminio y más de 4 millones de toneladas de acero y hoy no queda nada.
«Lo han convertido en una chivera, están en la carraplana y por eso tenemos que luchar, por recuperar cada espacio y porque el estado Bolívar y sus empresas vuelvan a hacer las primeras del país», dijo.